Mal Uso De La Libertad – Gálatas 5:13

John Fredericksen|Durante mis años de escuela secundaria, conocí a muchos a quienes se les permitía asistir libremente a funciones escolares o simplemente salir con amigos varias veces por semana.

por el pastor John Fredericksen

La Sociedad Bíblica Bereana (Berean Bible Society) publica diariamente en su sitio web artículos devocionales con el nombre Daily Transformation. En 2T15, publicamos traducciones al español de dichos artículos, con la finalidad de poner el mensaje de la gracia de Dios al alcance de los hermanos en Cristo de habla hispana. Sea de bendición para su vida.

ver original

Durante mis años de escuela secundaria, conocí a muchos a quienes se les permitía asistir libremente a funciones escolares o simplemente salir con amigos varias veces por semana. Pero en nuestra casa a los adolescentes sólo se les permitía salir una noche a la semana, sin excepciones. Uno de los problemas de estar tan restringido fue que, una vez que se nos concedió esa libertad nocturna semanal, mi hermano y yo llegamos a extremos para aprovechar al máximo el tiempo limitado que teníamos. Estábamos abusando de nuestra libertad con una conducta muy pobre.

Un problema similar existía en la mayoría de las iglesias fundadas por el apóstol Pablo. Muchos de los que habían sido liberados de la estricta esclavitud de la Ley Mosaica estaban abusando de su recién adquirida libertad. Pablo quería que “estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud” (Gálatas 5:1 - RV1960). Pero algunos se estaban tomando la libertad hasta extremos de conducta pecaminosa. Por eso las cartas de Pablo advierten sobre la inmoralidad, la mentira, el robo, la embriaguez, la falta de generosidad y más. Pablo les dice: “… hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros” (Gálatas 5:13). Dios les había dado gran libertad por gracia, pero no debían abusar de esa libertad. Estos abusos ofendían a los nuevos creyentes y avergonzaban el testimonio de Cristo. Entonces Pablo abordó este problema diciendo: “Pero mirad que esta libertad vuestra no venga a ser tropezadero para los débiles” (1 Corintios 8:9). Además de la conducta pecaminosa o de ofender a otros, existen dos estándares para juzgar el uso adecuado de la libertad. Pablo dijo: “Todas las cosas me son lícitas, mas no todas convienen… No me dejaré dominar de ninguna” (I Corintios 6:12). Si tus decisiones te hacen perder el autocontrol que te impide realizar prácticas pecaminosas, están equivocadas. 1 Corintios 10:23 aconseja: “Todo me es lícito… pero no todo edifica”. Si tus decisiones no edifican a otros creyentes en Cristo, ellas también se convierten en un mal uso de la libertad.

La libertad en Cristo también se puede abusar hoy. Tenemos libertad en nuestras elecciones de vestimenta, cónyuge, longitud del cabello, bebidas consumidas, frecuencia en las Escrituras y participación en la iglesia. Pero no debemos usar nuestra libertad “como ocasión para la carne”. Proponte hoy que tu libertad solo sea utilizada para honrar a Cristo.

Publicar un comentario

0 Comentarios